Pasados más de 10 días del inédito temporal que azotó el partido de Mercedes y toda la zona, con ráfagas de viento de 125 kilómetros por hora que provocaron voladuras de techos, estructuras de todo tipo y severos daños en las redes de energía y distintos servicios, desde la Cooperativa Eléctrica Julio Levin siguen trabajando fuertemente en solucionar los inconvenientes provocados por este fenómeno climático cuya intensidad no tenía registro previo.
Cabe destacar que la Cooperativa suministra energía eléctrica a una amplia zona con unos 3500 usuarios de los cuales son 1550 rurales, 1891 urbanos y 59 industrias. En lo que hace al cableado de líneas de media tensión (13,2 KV) hay 610 km de recorrido de los cuales 30 km son de retorno por tierra, 70 km convencional clásico y 510 km convencional trifásico. Y en baja tensión (220-380 V) hay 180 km totales de los cuales son 40 km convencional trifásica, 115 km de preensamblado y 25 km de convencional monofásica.
La Cooperativa suministra energía eléctrica a una amplia zona con unos 3500 usuarios de los cuales son 1550 rurales, 1891 urbanos y 59 industrias
De acuerdo a datos relevados por este medio las afecciones del tendido fueron más que severas en territorio de la Cooperativa Levin: entre los de madera se quebraron unos 340 postes de media tensión de 9 metros y 178 postes de baja tensión de 7,5 metros. Pero las estructuras de hormigón también sufrieron daños, con 11 columnas de media tensión y 18 columnas de baja tensión rotas. Asimismo, hubo una importantísima y kilométrica cantidad de conductores caídos y / o cortados, en diferentes tipos de líneas y tensiones, así como unos 37 trasformadores trifásicos y 17 monofásicos severamente dañados. Por último, 372 bajadas de usuarios se dañaron. El panorama fue más que desalentador y mirando estos números se entiende la gravedad del problema y el impacto que tuvo el temporal.
Desde la Levin, el jefe de redes Claudio Schönfeld y el responsable técnico ingeniero Enrique Jasid compartieron detalles de lo que se está viviendo tras el temporal de magnitud inesperada. “Los trabajadores están cumpliendo tareas de sol a sol para tratar de reponer el servicio a todos los usuarios y lentamente se va avanzando”, explicaron y consideraron que se trató de un fenómeno inédito para la zona. Según datos de Protección Civil los vientos llegaron hasta los 125 km/h y en su mayor registro cayeron 17.6 mm de lluvia en 10 minutos a las 3.00 horas del domingo 17 de diciembre. Ese día llovieron en total 48.7 mm y al día siguiente cayeron otros 9.9 mm, lo que anegó los caminos.
“Hay que hablar además del impacto directo que se refleja en números, el indirecto, que tiene que ver con gran cantidad de voladuras de techos, caídas de árboles y ramas en distintas zonas y caminos anegados, lo que nos dificultó las tareas”, indicó Jasid.
Otro problema que causó demora en los trabajos fue la amplia zona afectada por el fenómeno. “Muchas cooperativas de distintas ciudades de la zona se abocaron también a este tipo de reparaciones por lo que la demanda de insumos como postes, transformadores y demás se vio afectada. Además los operarios debieron en muchos casos relegar tareas en función de su propia seguridad personal en el trabajo”, plantearon desde la Levin.
Lo cierto es que los trabajos siguen adelante por estas horas y no se detienen, e incluso se supo que el personal ofreció voluntariamente posponer sus vacaciones para poder satisfacer la alta demanda de trabajo y cumplir con los múltiples requerimientos de distintas zonas afectadas.