Tras: una gran manifestación en cercanías del Congreso, de la que entre otras organizaciones fue parte el Partido Obrero, el referente Pablo Demarco expresó su rechazo a la represión sistemática por parte del Estado nacional.
La situación escaló ayer cuando militantes, trabajadores, e incluso periodistas sufrieron agresiones.
En un comunicado de prensa desde el PO se informó que Eduardo Belliboni, hospitalizado tras recibir gas pimienta, fue dado de alta después de pasar por terapia intensiva debido a un cuadro respiratorio. Belliboni también fue golpeado en los riñones durante el desalojo de la Avenida Rivadavia por Gendarmería el miércoles.
La brutal represión dejó numerosos heridos, incluyendo periodistas, dirigentes populares y manifestantes.
Vanina Biasi, dirigente del Partido Obrero, sufrió seis impactos de balas de goma, y Matías Aufieri, abogado del Ceprodh, resultó herido en el ojo. El nuevo gas pimienta utilizado por la Policía Federal generó cientos de consultas médicas.
El comunicado del PO responsabiliza a Patricia Bullrich y a bloques del Congreso por la violencia.
La izquierda exige el retiro de la Ley Omnibus y la continuidad de la movilización contra el plan Milei y el protocolo de Bullrich.
El Partido Obrero insiste en la renuncia de Bullrich y defiende la libertad de movilización popular.
