La concejala Aida Laporta, de la UCR en Juntos por el Cambio, se ha mostrado firme en su apoyo a los vecinos de Mercedes que reclaman por las altas tarifas de peaje y la falta de mantenimiento en la Ruta Nacional 5. Tras la movilización que tuvo lugar el pasado domingo en las cabinas de peaje de Olivera, Laporta expresó su preocupación por la falta de respuestas a las demandas vecinales y la posible re-privatización del sistema de peajes.
Durante la protesta, que se extendió por más de una hora, los manifestantes lograron que las barreras fueran levantadas, ocasionando pérdidas significativas para la empresa concesionaria. «Si cada 15 días vamos a estar levantando la barrera los domingos, que es nuestro propósito, creo que pierden más de lo que ganarían ofreciendo un beneficio a los ciudadanos de Mercedes», señaló Laporta, quien también manifestó su sospecha de que la concesionaria está «entreteniendo» a los vecinos hasta que se concrete la re-privatización.
Laporta subrayó la frustración de los vecinos por la falta de respuesta a los petitorios presentados tanto por ellos como por el intendente, quien tampoco ha recibido respuestas concretas de las autoridades de Vialidad
En cuanto a las obras de ampliación de la autopista entre Mercedes y Suipacha, la concejala destacó que han recibido informes de que los trabajos se han reiniciado, una demanda histórica debido a la alta siniestralidad en ese tramo. «Bienvenidas sean las obras que tanto pedimos, por la cantidad de vidas que se han perdido en esa ruta», afirmó.
Sin embargo, Laporta subrayó la frustración de los vecinos por la falta de respuesta a los petitorios presentados tanto por ellos como por el intendente, quien tampoco ha recibido respuestas concretas de las autoridades de Vialidad. «La tarifa sigue aumentando, ya está en 1100 o 1200 pesos, y no hay ningún tipo de respuesta. Parece que están dejando pasar el tiempo hasta que se concrete la privatización», concluyó.
La situación parece lejos de resolverse, y se anticipa una nueva movilización que coincidirá con la Fiesta del Salame, en un intento de los vecinos por seguir visibilizando su reclamo.