Este lunes, la diputada nacional Vanesa Siley participó del abrazo simbólico al Hospital Nacional Laura Bonaparte, en apoyo a más de 200 trabajadores y trabajadoras que han sido despedidos recientemente.
El hospital, reconocido como referencia nacional en salud mental y consumos problemáticos, enfrenta una grave crisis que pone en riesgo su funcionamiento y la atención de una población altamente vulnerable.
Desde distintos sectores denunciaron que la política de vaciamiento implementada por el Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Salud, es parte de un proceso de desguace de la salud pública. La institución, que se caracteriza por ofrecer atención interdisciplinaria y comunitaria, depende de un equipo conformado por psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales, enfermeros, terapistas ocupacionales, personal administrativo, de mantenimiento y choferes, quienes sostienen el funcionamiento diario.
«Sin trabajadores, no hay salud mental. Vaciar es cerrar», destacaron durante la manifestación, en la que se exigió la inmediata reincorporación de los empleados desvinculados.
La diputada Siley expresó su solidaridad con los despedidos y su compromiso de seguir luchando por la reincorporación de todos los afectados. «Estamos a disposición para acompañar esta lucha, que es en defensa de la salud pública y de quienes más lo necesitan», afirmó.
El Hospital Nacional Laura Bonaparte es uno de los pocos centros especializados en salud mental del país, y su desfinanciamiento podría generar un impacto profundo en la atención de personas en situación de vulnerabilidad económica y de salud.