El reloj marca las 8.40 y en la estación de Luján comienza otro viaje rumbo a Mercedes. Suben trabajadores, estudiantes y vecinos que, como cada día, deben resignarse a uno de los escasos cuatro servicios diarios que unen ambas localidades. Un recorrido que debería demorar poco más de 30 minutos, hoy se extiende por más de una hora bajo el denominado “diagrama de emergencia”, vigente desde el 10 de abril por las obras de renovación de vías en el ferrocarril Sarmiento.
El convoy con sus tres vagones avanza lento, muchas veces se detiene, tarda en las estaciones, con frío colándose por las ventanas mal cerradas y rostros que no esconden el cansancio. No hace falta hablar: la expresión de los pasajeros lo dice todo. No es fácil depender del tren cuando hay tan pocos horarios y tanta demora, además cuando el dinero no alcanza para el bondi y no hay otra opción que subirse al FFCC.
Por esto último quizá muchos prefieren este medio antes que subirse al colectivo de la línea 57, sobre todo los estudiantes de la UNLu que cursan desde Mercedes o las localidades intermedias (Jáuregui, Olivera, Gowland), que ven pasar el tren por la puerta de la universidad pero no siempre logran adaptarse a sus horarios nuevos.
Los actuales servicios entre cabeceras salen desde Luján a las 3.48, 8.40, 13.09 y 18.04, con arribos a Mercedes a las 5.07, 9.59, 14.28 y 19.23 respectivamente.
Son los únicos trenes disponibles en el tramo, insuficientes para la cantidad de personas que a diario deben trasladarse entre ambas ciudades.
Mientras tanto, las obras de renovación de vías siguen su marcha. Se espera que concluyan antes de fin de año, según relatan quienes viajan a diario y siguen de cerca los avances. Aunque entienden que los trabajos son necesarios, muchos vecinos sienten que el servicio está lejos de ser digno: esperan menos tiempo de viaje, más frecuencias y mayor comodidad.
El tren llega a Mercedes y las puertas se abren. Cada pasajero sigue su rumbo, sabiendo que el regreso será igual: lento, frío, resignado… pero en tren. Para muchos no hay de momento otra forma de viajar.