Con una gran convocatoria y un ambiente de unión y compromiso, el pasado viernes 11 de julio se realizó el Bingo Solidario organizado por la Asociación Cooperadora de la Escuela Especial N° 503 “Paul Harris”.
El evento tuvo lugar a las 20:00 horas y reunió a 93 personas, entre familias, vecinos y miembros de la comunidad educativa, que dijeron presente para colaborar con la institución, qué es dirigida por Carla Pederneschi, quien siempre aporta mucho para esta realizaciones.
Diego Castro Vylanyk, presidente de la Cooperadora, expresó su agradecimiento: “Fue un éxito total. Hubo mucha participación y también donaciones de comercios que siempre nos acompañan”, destacó. Entre los negocios que colaboraron con indumentaria y premios para los sorteos mencionó especialmente a Don Venancio, Paolo Massi y Bíos, a quienes agradeció por estar “siempre dispuestos a ayudar”.
Además del bingo, se ofreció servicio de cantina con comida y bebida, que también fue posible gracias a la colaboración de la Municipalidad de Mercedes, que proveyó insumos para la venta. “Los padres también donaron cosas, y con todo eso pudimos recaudar un buen monto para seguir trabajando”, comentó Diego.
Lo recaudado se destinará a uno de los grandes proyectos que impulsa la Cooperadora: la construcción de una plaza blanda, un espacio especialmente diseñado para que los chicos y chicas puedan jugar sin riesgo de lastimarse, adaptado a sus necesidades específicas. “Por las condiciones particulares de nuestros estudiantes, este tipo de infraestructura es muy importante”, explicaron.
La Escuela también continúa trabajando en otros objetivos como la creación de un salón multisensorial en la planta alta, un espacio de video para ver películas, y la puesta en funcionamiento de un roperito solidario, que permite que los alumnos puedan acceder a ropa cuando lo necesiten. “Hay familias muy humildes, y esta herramienta ayuda mucho”, expresó el presidente de la Cooperadora.
La labor cotidiana del grupo también incluye la compra de elementos como guantes de látex, resmas de hojas y materiales que muchas veces no están disponibles en el momento, para apoyar a las docentes en su tarea diaria. “La Cooperadora no es una molestia ni una billetera para la escuela: es un equipo que está para apoyar a la institución y a los chicos”, remarcó Diego.
Además, se realiza de forma continua la venta de pizzas por pedido, una iniciativa con la que también se recauda dinero para estos fines solidarios. Y como parte del fortalecimiento del trabajo organizativo, agradecieron especialmente a la presidenta del Consejo Escolar, Magui Oliva, por la donación de un freezer que ahora ya forma parte del equipamiento de la Cooperadora.
Finalmente, Diego Castro Vylanyk expresó su deseo de seguir sumando vecinos a este esfuerzo colectivo: “Queremos que se unan no solo los padres, sino toda la comunidad mercedina. Con un aporte mínimo de $2.000 mensuales, logramos cosas increíbles”.
