La jornada electoral en el Colegio Industrial se vio empañada por un incidente de agresión hacia la prensa. Varios periodistas que se encontraban en el lugar pasado este mediodía, para cubrir la votación del candidato a concejal por la lista «Vecinos por Mercedes», Bernardo Zubeldía, sufrieron acoso por parte de las fuerzas policiales, que intentaron desalojarlos. A esta situación se sumó el grito de «ensobrados» por parte de una persona que luego se identificaría como fiscal general.
A pesar de los inconvenientes, el primer candidato a concejal pudo brindar declaraciones, destacando en principio el «entusiasmo» de su equipo y la presencia de fiscales en todas las escuelas del distrito.
Zubeldía también dijo que hubo «algunas cosas para remarcar», como el «faltante» y el «robo de boletas», así como la práctica de dar vuelta las boletas de su lista para confundir al electorado. «Son maniobras y reglas del juego, parece, y lamentablemente nos tenemos que acostumbrar a esto», lamentó, instando a los votantes a revisar las boletas con atención.
La polémica por los fiscales ajenos al distrito
El candidato de la fuerza vecinalista también se refirió a la presencia de fiscales provenientes de otros distritos, como Quilmes y Morón, que, según denunció, no están en el padrón de Mercedes y no deberían estar fiscalizando. «Es algo que no corresponde», sostuvo Zubeldía, quien afirmó que ya se han tomado «cartas en el asunto» y se ha «apercibido» a la Junta Electoral sobre esta situación.
«Son todos voluntarios», destacó en tanto Zubeldía sobre los 150 fiscales que trabajan para su lista, en contraposición a las fuerzas que traen personal de otras localidades. Y para graficar el buen clima que intenta promover desde su espacio, el candidato reveló que llevó «empanaditas de Ambrosio» a los fiscales de mesa.
El «deber» de defender a los periodistas
Al finalizar la entrevista, Zubeldía no dejó pasar el incidente con la prensa –que se profundizó mientras lo entrevistaban– y se mostró solidario con los trabajadores que fueron agredidos. «Al periodista siempre hay que defenderlo», sentenció, en lo que pareció ser una respuesta directa a las acusaciones que recibieron los comunicadores, al tiempo que lanzó una crítica velada al discurso que se emite desde otras esferas: «Hay una bajada de línea que siempre los periodistas son malas personas», objetó.