El pasado viernes la ciudad de Mercedes celebró la apertura formal de «La Mendocina», una nueva tienda de quesos y fiambres que se ha instalado en una emblemática esquina que permanecía ociosa: la intersección de calles 11 y 106.
En estas horas además en el local se contó con la presencia del intendente municipal Juan Ignacio Ustarroz, quien visitó el lugar para felicitar a sus propietarios, Lucas Losinno y su esposa Belén Raffín, y hacer entrega del certificado de habilitación correspondiente.
El jefe comunal celebró el avance de este emprendimiento en la zona, destacando que «La Mendocina» no solo se constituye como un nuevo punto comercial, sino como un centro de encuentro y reactivación barrial.
El intendente Juan Ignacio Ustarroz entregó el certificado de habilitación en el marco del lanzamiento formal de la tienda de quesos y fiambres en la histórica esquina de 11 y 106, destacando su rol como polo de encuentro barrial.
El negocio es impulsado por el productor local de Chacinados, Lucas Losinno, cuya marca ya está posicionada en el mercado mercedino, y su esposa, Belén Raffín, quien es la «Mendocina» que da nombre al lugar (un homenaje a ella y a su hija, ambas oriundas de Mendoza).
La propuesta de «La Mendocina» se centra en una experiencia gourmet diferenciada:
- Chacinados Losinno como base de la oferta.
- Una amplia selección de quesos artesanales y fiambres de primera línea.
- Productos de Mendoza: Fiel a su nombre, el local importa directamente vinos, aceitunas, frutos secos y aceite de oliva de alta calidad.
Lucas Losinno subrayó que, a pesar de la calidad superior de los productos, el emprendimiento hace un esfuerzo por mantener un «precio diferencial» para que su consumo «no sea prohibitivo».
La inauguración formal del viernes, que sirvió de marco para la visita municipal, se había anticipado con un evento especial que incluyó una degustación de Gin «Héctor», ofreciendo un adelanto del ambiente social que busca crear el local.
El proyecto incorpora un espacio de esparcimiento en el exterior, poniendo mesitas y sillas para que la gente pueda sentarse a «comer sándwiches y picadas», fomentando el encuentro social en el barrio. El local opera de corrido, de lunes a domingos, de 7 de la mañana a 10 de la noche.
Desde el Municipio, se les deseó «muchos éxitos en este nuevo proyecto», reconociendo el esfuerzo y la buena voluntad de la comuna para acompañar los trámites de apertura del emprendimiento.
