
En un contexto de creciente demanda social, la Unidad Básica «Curro Iriart», del Partido Justicialista, realizó el cierre anual de sus actividades, poniendo en valor el trabajo militante que permitió sostener la asistencia alimentaria en tres puntos estratégicos de la ciudad.
El encuentro sirvió como balance de un ciclo que los propios integrantes calificaron como «duro», tanto para las familias beneficiarias como para los voluntarios.
Sostener el plato de comida: el trabajo en los barrios
La organización destacó que, gracias a un esquema de trabajo planificado y solidario, se logró mantener el funcionamiento ininterrumpido de los comedores en:
- Barrio Santa Teresita
- Barrio Blandengues
- Barrio Almafuerte
Este despliegue territorial ha sido fundamental para paliar los efectos de la inflación y la caída del poder adquisitivo que afectó a los sectores más vulnerables durante el último año.
Un balance entre la necesidad y la solidaridad
Desde la conducción de la UB «Curro Iriart» expresaron su profundo agradecimiento a las «compañeras y compañeros» que, de manera organizada, dedican su tiempo a la cocina y logística de las viandas.
«Fue un año difícil para muchos, tanto para quienes reciben la vianda como para quienes cocinan y hacen que esto siga funcionando. El corazón estuvo por sobre todo», manifestaron a través de sus canales oficiales, resaltando la mística de la agrupación en tiempos de adversidad.
El cierre de actividades no solo significó un momento de distensión, sino también una reafirmación del compromiso de la unidad básica para con los vecinos de Mercedes de cara al inicio del 2026, donde prevén que la asistencia social seguirá siendo un pilar fundamental de su agenda política y comunitaria.


























