A poco más de dos años de la explosión de la fábrica de agrotóxicos Sigma, ocurrida el 27 de septiembre de 2019, los vecinos insisten desde la zona de La Verde con la necesidad de que se investigue lo sucedido y se avance en lo que consideran una “producción criminal” que se llevó a cabo y produjo esta tragedia.
“La explosión no fue accidental, y sucedió por el funcionamiento de la fábrica, que era de categoría 3, muy peligrosa, y no tenía las certificaciones ni habilitaciones que requiere”, comentó Bárbara Rivkin, en el programa “La Siesta Que No Fue”, que se emite por Radio Kermes 106.1 FM.
En este sentido sostuvo que el resultado fue el derrame de millones de litros de agrotóxicos que quedaron en el aire, el suelo, y contaminaron la cuenca del Río Luján. “Este lugar no corresponde para instalar una fábrica de categoría 3”, sostuvo la mujer y recordó que un trabajador murió más allá de la cantidad de líquidos que se liberó al ambiente con un gran efecto contaminante.
“Hay una causa penal por el fallecimiento, y un grupo de bomberos voluntarios, que no tenían los materiales adecuados, vinieron a apagar este incendio y resultaron afectados en su salud”, agregó la vecina sobre las consecuencias de este este incendio descomunal.
«Todo el proceso judicial presenta demoras sustanciales”, indicó. “Hasta ahora ni la causa penal ni la civil, que está en la justicia provincial, han dado avances. Todavía no se pudieron hacer pericias, el fiscal Solimandi no ha llamado a declarar a ninguna de las autoridades involucradas, solo hemos declarado los demandantes», explicó.
“Ni los responsables locales ni provinciales fueron llamados a declarar”, remarcó Rivkin.
“Nunca paramos, nunca dimos el brazo a torcer y cuando nos cierran las puertas en algún lado, gracias a la experiencia y trabajo de los abogados, buscamos otro frente por donde luchar”
«Tenemos que recurrir a la justicia porque las autoridades locales no dan respuestas. La fábrica necesita una remediación en el predio, para que la contaminación no siga penetrando”, explicó luego la vecina. “Todo está parado, en el predio de la fábrica podemos ver que se ha hecho un maquillaje verde, se pusieron piedras, algunos árboles que no prosperan, también algunos animales para la ilusión de una granja, algo ecológico, pero nada en serio nada sustancial», denunció.
“Tuvimos que ir a la fiscalía federal, salir de la provincial, porque hay una cantidad de requisitos que el caso Sigma tiene para que podamos hacer esta operación, y el jueves pasado la justicia provincial remitió la causa a la fiscalía federal”, comentó la mujer e indicó que hay “muchas pruebas y evidencia” en 4 cuerpos y 13 anexos con 200 fojas aproximadamente. “Hay muchas pruebas y evidencias y esto ahora está en estudio y se emitiría una resolución pero por la magnitud de la causa suponemos que será en febrero, luego de la feria”, amplió y destacó que “empujan y tiran del carro” para que “un delito tan grave, como poner en riesgo la Salud Pública, no quede en la nada”.
“Nunca paramos, nunca dimos el brazo a torcer y cuando nos cierran las puertas en algún lado, gracias a la experiencia y trabajo de los abogados, buscamos otro frente por donde luchar”, expresó.
Ahora la justicia federal está evaluando si toma la causa o no. El jueves pasado el fiscal Solimandi envió al fiscal federal Carlos Stagnaro las actuaciones. “Queremos que esto salga de la vía muerta”, detalló por otra parte, a este medio, el vecino Martín Barros, otro de los habitantes de La Verde que espera que se investigue a Sigma.