El 31 de marzo Pablo Blasberg inaugurará una muestra en el Estudio de Arte Cueto con sus pinturas abstractas. Lo hará junto a un escultor que vive en Mercedes pero es poco conocido en la ciudad, Félix Cáceres Pagés, quien es dueño de una calidad artística singular.
Será la primera muestra individual de arte abstracto del periodista gráfico Blasberg, y la encara con fuerza. La pintura lo motiva por estos días al reconocido dibujante grafico y humorista, quien actualmente es jefe de Infografía en la Agencia Télam y ha trabajado y trabaja para prestigiosos medios del país y el mundo como Clarín, La Nación, El País, El Mundo, ABC, Le Monde y The Times, entre otros.
A través de la pintura abstracta se dedica quizás a lo opuesto a lo que cotidianamente hace en su trabajo en medios de prensa, ilustrando la realidad.
Si bien será a fin de este mes, aún la muestra no tiene nombre. Pero este podría tener que ver con su paso a la abstracción.
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“Marcela Cueto en su Estudio ya está preparando todo un calendario, como viene haciendo desde el año pasado, para cubrir cada mes con diferentes exposiciones. Y este año tengo la suerte de empezar con esta muestra que aun no publicitamos pero el viernes 31 de marzo se inaugurará. No es una muestra individual, ya que voy a estar con un escultor. Yo voy a participar con pinturas abstractas, que es lo que vengo haciendo últimamente, y este escultor es Félix Cáceres Pagés, que es un escultor de Buenos Aires que reside acá en la ciudad hace unos cuatro o cinco años”, contó Blasberg, entrevistado por este medio.
El escultor que lo acompañará en la expo también está trabajando con imágenes abstractas. “La invitación de Marcela fue para que reunamos los trabajos de ambos, y estamos en este momento seleccionando los que vamos a presentar. En el caso mío va a ser con curaduría de la licenciada Ana Aldaburu”, contó Blasberg y destacó el apoyo de esta mercedina bastante conocida en el ambiente artístico, que es licenciada en Filosofía especializada en Arte y Pintura: “Ella me está ayudando a hacer la selección de obras y está escribiendo unos textos sobre mi trabajo y diferentes aspectos entre los cuales está el nexo entre el mundo de la ilustración periodística y de la comunicación del que vengo y cómo llego a la pintura”, reveló el artista sobre el marco conceptual que hay detrás de esta expo.
“Yo pinto prácticamente desde hace 20 a 25 años en forma paralela a mi trabajo como ilustrador. La pintura mía empezó siendo como una expresión más plástica de mi trabajo como dibujante y con el correr de los tiempos esa figuración, en donde siempre aparecían personajes o referencias a figuras humanas, se fue rompiendo. Yo la fui rompiendo como una necesidad de libertad, una búsqueda de libertad hasta que llegué a la abstracción, que podría decirse que es expresionismo abstracto que es casi lo contrario de lo que estoy haciendo con lo periodístico”, agregó Blasberg y sintetizó que se pretende describir una realidad en la ilustración periodística, mientras que en el caso de la pintura abstracta –en un mundo prácticamente opuesto– se juega con elementos plásticos básicos como son la forma, el color, la mancha, la línea, sin hacer referencia a ningún elemento objetivo de la realidad: “Lo interesante de la pintura abstracta es que genera una ventana para que el espectador vea qué le sucede. Es una especie de espejo”, reflexionó. “La persona que ve una pintura abstracta tiene que poner algo de sí misma, ya que el mensaje no es claro. No es una vaca comiendo pasto, o un señor corriendo. No hay nada pero hay manchas, hay colores, hay composición, hay equilibrio, desequilibrio y la persona que lo ve puede tener diferentes sensaciones, dependiendo de su apertura hacia nuevas imágenes o hacia nuevos mundos. Por eso es que en este tipo de manifestación artística el espectador termina cerrando la obra. Cada persona que ve una pintura ve algo diferente, aplica su propio filtro de su historia, de sus visiones y de su mirada personal”.
«El trabajo que está haciendo Marcela Cueto es encomiable. Está generando un espacio en donde los artistas podemos mostrar nuestra obra y donde hay mucho intercambio entre fotógrafos con pintores, pintores con escultores, gente que hace collage con dibujantes… esa multiplicidad de disciplinas, le da mucha riqueza»
Por último, los trabajos estarán a la venta en el ámbito del Estudio de Arte Cueto, que concita distintas expresiones y manifestaciones de manera abierta a la comunidad de los artistas. “El trabajo que está haciendo Marcela es encomiable. Está generando un espacio en donde los artistas podemos mostrar nuestra obra y donde hay mucho intercambio entre fotógrafos con pintores, pintores con escultores, gente que hace collage con dibujantes… esa multiplicidad de disciplinas, le da mucha riqueza. Creo que es un aporte muy importante para la ciudad y se está buscando generar una experiencia de que el arte tiene un valor comercial, por eso también la gente puede comprar las obras. La entrada a las exposiciones es libre y gratuita, cualquiera puede ir y disfrutar las muestras pero las obras están en venta a precios bastante accesibles. Esto facilita el coleccionismo, o que la gente que le gusta el arte o que quiera hacer un regalo de casamiento, para una fiesta u ocasión, puede regalar una pintura original, un dibujo o un grabado original. Es algo que se está valorando cada vez más”, celebró Blasberg y también destacó que desde el Estudio de Arte Cueto se intenta insertar este espacio dentro de la oferta turística de la ciudad: “Está viniendo mucha gente de Buenos Aires no solo a vacacionar, sino a pasar fines de semana y el espacio de arte es un lugar más, aparte de las cosas lindas que tiene Mercedes desde el punto de vista de la naturaleza y otros espacios de la ciudad. Una galería de arte también es algo interesante para recorrer”, completó el artista.
