Familiares y amigos de Rodrigo González, el joven mercedino fallecido el viernes 15 en el puente de Olivera, reclamaron esta tarde en ese lugar por justicia, ante la liberación de los dos detenidos en el día de ayer.
Sobre el puente, el papá y la mamá de Rodrigo instalaron una cruz de madera en recordatorio del joven fallecido.
Participaron unas 150 personas, que viajaron en caravana de autos y motocicletas hasta Olivera pero también se sumaron a la manifestación vecinos del pueblo.
«No fue un accidente, a Rodrigo lo mataron», expresaron antes de hacer rugir sus motos a modo de homenaje a Rodrigo.
Algunos de los presentes se expresaron en duros términos respecto de las dos personas que estuvieron detenidas y fueron liberadas ayer, a quienes sindicaron como autores de otros delitos.
En el acto de homenaje a Rodrigo hubo una importante presencia policial. Efectivos de la comisaría Luján Segunda se apostaron en el paso a nivel de Olivera en procura de evitar incidentes.
