Evangelio de Lucas capítulo 2, versículos 16 al 21. En este primer día del año civil 2020 estamos invitados a celebrar la Solemnidad de Santa María Madre de Dios.
Nos dice el Evangelio: “En aquel tiempo, los pastores fueron a toda prisa, y encontraron a María y a José, y al Niño acostado en el pesebre”
El Niño recién nacido. No es María la que le da la divinidad a Jesús. Ella le da la humanidad. Pero este Niño es hijo de Dios, por lo que podemos decir que María es Madre de Dios. Esa unión ontológica, unión hipostática del Verbo (1), María engendra la naturaleza humana de Jesús, la cual es asumida por la naturaleza divina, que viene del Espíritu Santo.
Por ende si Jesús es Dios, María es la Madre de Dios. Y esto es lo que celebramos.
Pero más allá de esto estamos invitados a que hoy, en medio de nuestros brindis y comidas, nos animemos a proyectar un año, todo un año, este 2020, de la mano de María.
Yo lo invito a que en este momento en que usted está leyendo se diga a sí mismo Jesús, junto a María quiero recorrer este año. Porque si recorro este año junto a Ella, que es tu Madre y que por tu voluntad también es la mía, sean cosas buenas o malas, todo lo que suceda será para tu Gloria.
Queridos hermanos de Noticias Mercedinas: iniciamos un nuevo año. Que sea con logros, con fracasos, con la vida, porque de eso se trata. Las tormentas no se enfrentan, se atraviesan. Y en esas tormentas luego aparece Jesús y calma las aguas. Nos dice No temas, estoy yo.
Que tengamos un bendecido 2020 de la mano de María. Que nos encuentre a todos unidos como familia y como patria.
(1) La unión hipostática es un término técnico que designa la unión de las dos naturalezas, divina y humana, que en la teología cristiana se atribuye a la persona de Jesús.
