Los guionistas de «La uruguaya» recibieron el Premio Argentores al Mejor Guion. El equipo autoral de la primera película de Orsai (comunidad y productora de contenidos creada por Hernán Casciari) es encabezado por el mercedino Christian Basilis, y recibió este premio por parte de las autoridades de Argentores y del Consejo Profesional de Cine. Al galardón lo habían obtenido en el Festival Internacional de Cine del Fin del Mundo, realizado en abril en la ciudad de Ushuaia.
De manos de autoridades de Argentores (Miguel Angel Diani, Presidente; Guillermo Hardwick, Secretario; Irene Ickowicz, Presidenta del Consejo Profesional de Cine, e Ivonne Fournery, Vocal del Consejo citado), algunos de los responsables del guion (Sofía Badía, Melania Stucchi, Christian Basilis, Marcos Krivocapich y Pedro Mairal), recibieron la distinción. Completan el grupo autoral Ana María Blaya, Josefina Licitra, Alejo Barsmach y Juan Games.
La película, que fue dirigida por Ana María Blaya, cuenta la historia de Lucas Pereyra, un escritor argentino que viaja a Uruguay en el día para ir a buscar unos dólares que cobró por la venta de un libro que aún no entregó. En Montevideo tiene pactado un encuentro secreto con Magalí Guerra, anclado en un recuerdo de una visita anterior. Pero, como suele ocurrir, no todo sale como se planea. El argumento está basado en la novela homónima de Pedro Mairal, publicada en 2016.
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“La uruguaya”, de acuerdo al grupo autoral, es una “comedia romántica que tiene ingredientes de thriller”, cuenta con un final que “tiene que ver con lo policial” y sucede en una tierra, como es la oriental, que es, de acuerdo al autor de la novela original, “el otro lado del espejo, algo que se parece, pero no es tan así, un lugar donde se pasa con rapidez de la familiaridad al extrañamiento”.
Por estos días la película «La uruguaya» está en cartelera en los principales cines de Argentina y Uruguay.
Para conocer más detalles de este asunto fue entrevistado el mercedino Christian Basilis, quien al preguntarle cómo le llega personalmente este reconocimiento, no dudó en destacar que este es su “mejor momento laboral”: “Yo empecé a trabajar en esto a los 40 años, ya un poco tarde. Siempre quise trabajar en la industria audiovisual y por diferentes razones lo había postergado. Pero cuando cumplí 40 fue como una bisagra, dije que lo iba a intentar, y me metí de lleno a laburar. Empecé trabajando en la televisión de aire escribiendo una tira diaria, un capítulo por día, era una fábrica de escritura demencial (N de la R: «Los ricos no piden permiso»). Y desde entonces hasta ahora, que pasaron 12 años, yo pasé por diferentes eslabones en la cadena productiva y ahora estoy con una productora propia, con la posibilidad de diseñar, armar y escribir proyectos propios, no solamente entre nosotros, sino con la ayuda y el apoyo de una comunidad. Estamos con un modelo productivo alucinante y con una película, que es nuestra primera película que se estrena en 60 salas y con una afluencia de público muy buena en su primera semana. Por lo tanto estoy increíblemente agradecido”, explicó Basilis.
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Para el mercedino, este premio “es una caricia en el lomo” a un trabajo que –reconoce– también tiene un montón de dificultades, sinsabores y trabas en el camino. “Por momentos uno llega a pensar ¿Qué carajo estoy haciendo acá?, ¿Por qué? ¿Quién me manda a mí hacer este laburo? Pero también tiene esta otra cara, de cosas positivas, y entre ellas un premio como este, que me pone muy feliz, muy contento y muy agradecido a la gente de Argentores”, cuenta.
«Por momentos uno llega a pensar ¿Qué carajo estoy haciendo acá?, ¿Por qué? ¿Quién me manda a mí hacer este laburo? Pero también tiene esta otra cara, de cosas positivas, y entre ellas un premio como este, que me pone muy feliz»
Y consultado sobre cómo se dio el trabajo en este caso, y con quiénes estuvo elaborando el guion, remarcó en principio que hubo poco tiempo: “Para escribir el guion teníamos sólo tres meses, porque ya habíamos arrancado con la maquinaria de financiamiento y la fecha de preproducción estaba fijada en el calendario y era inamovible. Por lo tanto lo que hice fue convocar un equipo de escritores jóvenes con los que teníamos relación con los que ya habíamos trabajado en la revista Orsai, y con ellos dedicamos los primeros dos meses a pensar diferentes caminos para adaptar la novela. Yo estuve en el rol de coordinador de equipo y ellos en sí en su rol de guionistas. Fue un trabajo absolutamente en equipo, los primeros tres meses fueron a prueba y error, diseñamos diferentes caminos posibles, diferentes argumentos. Escribimos varias síntesis hasta que nos quedamos con una, con la más simple y lineal, y la más parecida al camino argumental de la novela. Dedicamos dos meses a este proceso de este buscar caminos posibles y el último mes lo dedicamos a la escritura del guion y terminamos el primer mes con una versión primera de ese guion, y al mismo tiempo había arrancado la preproducción de la película. Entonces a esa primera versión del guion la agarramos Josefina Licitra y yo, la pulimos y la trabajamos y la elaboramos durante un mes más. Al siguiente mes entraron Pedro Mairal, el autor de la novela, y Ana García Blaya, la directora. Así terminamos de cerrar la última versión del guion y con esa última versión fuimos a rodaje. En los rodajes, siempre se hace lo mejor que se puede, y con el material filmado nos sentamos en la isla de edición la directora, el editor, Josefina y yo. Ahí terminamos de reescribir la película en la sala de montaje, y el resultado final es el que se está viendo ahora en las pantallas de cine. Fue un proceso de mucho vértigo y mucho aprendizaje, con un resultado para nosotros muy feliz”, relata Basilis.
En la reescritura que se hizo en la sala de montaje fue donde surgió la idea de cambiar la voz en off de la película. De ser narrada por Lucas Pereyra, el protagonista de la novela de Pedro Mairal, pasó a ser narrada por el personaje de su esposa, Catalina, lo que cambió por completo la óptica y le dio un punto de vista diferente a la película respecto de la novela.
LA URUGUAYA – GUIONISTAS
Sofía Badia
Melania Stucchi
Marcos Krivocapich
Juan Games
Alejo Barmasch
Josefina Licitra
Pedro Mairal
Ana García Blaya
Christian Basilis
