La legada del frío, la alergia y las enfermedades respiratorias se relacionan. Es que durante los meses de otoño e invierno comienzan las alergias, los cuadros de gripe y otras patologías un poco más severas, que afectan sobre todo a los bebés, los niños y los adultos mayores. Hay que estar atentos al clima en Argentina y poder actuar en consecuencia.
Más allá de la actual pandemia, las enfermedades respiratorias son una de las principales causas de muerte en la Argentina, especialmente en quienes tienen entre 60 y 65 años, y en los bebés desde el nacimiento hasta los 5 años. Si bien pueden desarrollarse en cualquier momento del año, los meses del otoño y del invierno son más frecuentes.
En los más chicos, sobre todo en los menores de 2 años, la bronquiolitis (una de las enfermedades de la vía respiratoria baja) es la primera causa de consulta y hospitalización, no solo por la enfermedad en sí, sino por su asociación con la neumonía. La bronquiolitis está provocada por el virus sincicial respiratorio (VSR) para el cual hasta el momento no existen vacunas.
Las medidas de origen “casero” para la prevención tienen que ver con una alimentación saludable, evitar el hacinamiento y optar por los ambientes aireados, algo que en esta pandemia de coronavirus es muy adecuado y recomendado por otra parte.
Y otro mal del invierno es la neumonía, con preponderancia en prematuros, niños y niñas con cardiopatías, con asma o broncoespamos, e inmunosuprimidos.
El clima se enfría y aparecen los síntomas. Pero para poder comprobar que hay una alergia en medio de estos lo recomendado es hacer pruebas percutáneas.