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El padre Luis Jáuregui se despidió de la parroquia San Vicente de Paul y asume un nuevo desafío pastoral

Este domingo, la parroquia San Vicente de Paul en la ciudad de Mercedes vivió un momento emotivo y significativo: el padre Luis Jáuregui ofició su última misa como párroco. Tras varios años de dedicación y servicio, se despidió de los fieles que llenaron el templo en una ceremonia vespertina cargada de emoción y gratitud.

Es que a partir del 7 de julio, el padre Luis asumirá como nuevo párroco de las comunidades de San Marcos Evangelista y Nuestra Señora de Luján en la ciudad de Marcos Paz. Su ministerio en estas nuevas parroquias comenzará oficialmente con la misa de las 19:00 horas.

En una entrevista exclusiva con este medio, el padre Luis compartió sus sentimientos sobre este importante cambio en su vida: «Me es muy difícil poder traducir en palabras las sensaciones que estoy viviendo. Son muy fuertes. Si bien quedó la sensación de poco tiempo, lo vivido aquí en Mercedes, con pandemia incluida, ha sido un tiempo muy fuerte, muy rico, de mucho aprendizaje y vivencia comunitaria. Estoy infinitamente agradecido a Dios y a la comunidad de San Vicente que ha sido muy buena, acogedora y participativa. Ahora, a la espera de vivir una buena experiencia en la comunidad de Marcos Paz. Yo diría que las palabras gratitud y esperanza resumen el momento que estoy viviendo».

«Si bien quedó la sensación de poco tiempo, lo vivido aquí en Mercedes, con pandemia incluida, ha sido un tiempo muy fuerte, muy rico, de mucho aprendizaje y vivencia comunitaria»

Respecto a los desafíos futuros, el padre Luis explicó: «Los desafíos los plantea la realidad. Hasta que no llegue, no puedo hablar concretamente. Para mí, el primer desafío es integrarme en una comunidad que sé que tiene mucha vida y muchos servicios. Ver de qué manera poder acompañar todo eso será fundamental. Definir claramente los desafíos será posible cuando llegue y vaya conociendo la realidad».

Mientras tanto, en la parroquia San Vicente, hasta que se designe un nuevo párroco, el padre Daniel Guerra asumirá como Administrador y el diácono Mario Segura como Coordinador Pastoral. Además, los seminaristas de primer año que participan en la parroquia serán acompañados por el padre Lucas Jerez.