Se llevó adelante un encuentro en homenaje a Martín Chiminelli, este sábado por la mañana. La plaza principal del Centro Cultural La Trocha lleva ahora su nombre. Además, se pintó un mural y se colocó una obra de arte. Fue una iniciativa de sus amigos y seres queridos acompañada por una ordenanza del Concejo Deliberante.
“Gracias por estar, gracias al intendente por este reconocimiento, simplemente quiero decir que Martín era pueblo, calidez, generosidad, siempre atento a donde se lo necesitaba”, expresó Emilia Benítez, su esposa.
El mural estuvo a cargo del artista Jorge Blanco mientras que la obra estuvo a cargo de Daniel Hirtz. Una refleja su pasión por la pesca mientras que la otra exposición es un recuerdo de su figura y sonrisa.
Jorgelina Silva, secretaria de Desarrollo de la comunidad, explicó cómo surgió este homenaje a Martín Chiminelli. «Poco tiempo después de su fallecimiento sus compañeros de trabajo y amigos empezaron a pensar en una plaza para ponerle su nombre, porque él venía en el último tiempo recuperando espacios verdes, públicos y compartidos, metiéndose en los lugares más recónditos. Venía con las ideas de puesta en valor, pero también con las demandas de la zona y lo que se debía hacer”, comentó. “El quería que funcionaran para los vecinos, sin olvidar sus demandas, necesidades, era un verdadero articulador, una persona que sentía el dolor del otro como propio, donde todo el tiempo trataba de hacer cambiar esa realidad, siempre luchando por un mundo más justo”, destacó Silva y mencionó que “en la búsqueda de un espacio dónde hacerlo surge la propuesta de Sabrina Viñales de nombrar esta plaza con su nombre”.
Por su parte la concejala de Partido Fe, Sabrina Viñales, muy emocionada expresó: “Estoy eternamente agradecida a todos los bloques del Concejo Deliberante por el acompañamiento por unanimidad, pero la realidad es que el doctor Ustarroz, en aquel inicio de sesiones del año 2020 comentó que deseaba homenajear a Martín y fue así que avanzamos en la presentación”.
“Me pidió la familia que hablara, su mamá sobre todo, porque se iba a emocionar y no iba a poder decir lo que deseaba. Para la familia es un momento muy especial. Martín era una persona muy comprometida socialmente. Estamos muy agradecidos”, sostuvo la edil y remarcó que “los que lo conocimos sabemos cómo era y hay una frase que no me olvidaré nunca, que escribió la hija de Mariana San Martín, que dice que Martín era ‘el petiso de las Topper blancas, de la mirada iluminada y la sonrisa contagiosa’. Eso era Martín. Alegría y siempre ayudando. Lo tendremos siempre en nuestro corazón”.
«Si Martín estuviera acá seguro que no me dejaba hablar, pero como todos han dicho sabemos quién era, su compromiso con la sociedad, su solidaridad», mencionó «Chono» Villa
Sergio “Chono” Villa, representando a sus amigos, afirmó: “Quiero agradecer por este reconocimiento merecido. Si Martín estuviera acá seguro que no me dejaba hablar, pero como todos han dicho sabemos quién era, su compromiso con la sociedad, su solidaridad” y mencionó que “armó un grupo hermoso de trabajo con un objetivo que era trabajar por la ciudad”. Además sostuvo: “Buscamos recuperar espacios verdes y plazas compartiendo cuatro años hermosos, donde día a día hacíamos pequeñas grandes cosas para los barrios”, entre otros conceptos. “En lo personal compartí más de 20 años de amistad. Martín era esto, lo que generaba, lo que proponía, juntarnos, trabajar desde la alegría. Martín está presente siempre”, afirmó Villa.
Desde ahora, la plaza principal, que contiene el mangrullo y es parte del paseo de “Estación Juego” lleva su nombre.
Emilia, su esposa, agradeció a todos por estar, y al intendente por este reconocimiento: «Simplemente quiero decir que Martín era pueblo, calidez, generosidad, siempre atento a donde se lo necesitaba, un gran padre, marido, amigo, fue una gran persona. Muchas gracias a todas y todos», dijo.
Por último, quién tomó la palabra fue el intendente Juan Ignacio Ustarroz: “Recuerdo que hace 30 años lo conocí a Martín acá cerca, en las canchitas” comentó. “Recuerdo cuando empezó la gestión y el principio, donde todo era más duro, y Martín me decía siempre hagamos esto, aquello, lo otro, siempre pensando y planificando”.
“Martín era pueblo, calidez, sonrisa, y somos muchos los que lo extrañamos y nos enorgullecemos con este reconocimiento”, sostuvo el intendente. “A través de él queremos agradecer a su familia y decirle a las hijas que han tenido un gran padre que va a estar siempre acá, con su sonrisa iluminando esta parte del pueblo. Gracias Martín”, completó.
Desde ahora, la plaza principal, que contiene el mangrullo y es parte del paseo de “Estación Juego” lleva su nombre.
La jornada fue muy emotiva, con acompañamiento de sus compañeros de trabajo, amigos, familiares y seres queridos.