Inicio Emprendimientos Lo necesario para construir en seco: una alternativa en ascenso

Lo necesario para construir en seco: una alternativa en ascenso

En la actualidad, la construcción en seco pasa a formar parte cada vez más de un sistema de construcción tradicional, ¡tal como lees! Son tantas las edificaciones que se llevan a cabo con este sistema que se ha convertido en la nueva “construcción clásica”. Parece que atrás va quedando la técnica húmeda que implica más trabajo, riesgos y materiales.

Cuando nos referimos a materiales de construcción, es claro que se trata de palabras que abarcan un gran abanico de posibilidades, de manera que a continuación, vamos a hacer una diferenciación entre los materiales de construcción tradicional y aquellos que se usan en la edificación de inmuebles en seco.

MATERIALES EN SECO CONSTRUCCIÓN HÚMEDA
●     Perfiles de acero: existen varias alternativas en el mercado.

●     Placas de yeso.

●     Aislación: debe tener características térmicas, hidrófugas y acústicas.

●     Placas de madera.

●     Distintos accesorios, anclajes y fijaciones.

●     Se necesita un porcentaje ínfimo de agua para la construcción.

 

●     Ladrillos, placas de cemento o block.

●     Cemento, hormigón.

●     Arena.

●     Piedra.

●     Herramientas especiales: carretilla, hormigonera o mezcladora, palas para incorporar el cemento, llanas de goma y dentadas, baldes, ¡y mucho más!

●     Hierro y vigas.

●     Se necesitan muchísimos litros de agua para llevar a cabo una construcción tradicional.

A simple vista podemos notar que los elementos necesarios para llevar a cabo una construcción de la manera tradicional son mayores que cuando se trata de la construcción en seco. Sumado a ello, esta última, por varias razones es mucho más amigable con el medioambiente: se generan menos desperdicios (basura), se ahorra muchísima agua, e incluso, los materiales que se usan son mucho menos contaminantes que los de la edificación húmeda.

Por qué construir en seco

Son muchas las razones por las que la construcción en seco está en auge y, al parecer, ha llegado para quedarse. Te contamos los motivos:

  • El tiempo de obra se reduce entre un 30% a un 60%. Ello, obviamente, se traduce en reducción de costos de mano de obra, los que, en la construcción tradicional implican al menos el 48% de la inversión total.
  • Es interesante como tras una construcción en seco no quedan prácticamente desperdicios, tales como escombros, ladrillos rotos y demás materiales que en la forma tradicional de edificar podemos ver.
  • Finaliza la edificación y podés meter tus muebles, ya que no tendrás que lidiar con el polvillo y mugre molesta que suele quedar tras una construcción húmeda.
  • En general, si se usan los materiales aislantes correctos, son propiedades que se mantienen cálidas en inviernos y frescas en verano, dado que están perfectamente aisladas del exterior. Esto hace que las construcciones en seco sean capaces de ahorrar hasta un 30% en la energía requerida para ambientar los espacios.
  • Por otra parte, no podemos dejar de reconocer el hecho de que el aislamiento acústico es un 70% más eficiente que aquel que pertenece al sistema tradicional.

Los mencionados son tan solo algunos de los beneficios de esta excepcional opción de construcción.

Existen corralones como El Pimpollo, espacios en los que podrás encontrar materiales para ambos tipos de edificación, pudiendo hacer comparaciones y sacar así, tus propias conclusiones.